Es común escuchar que los bienes raíces son inversiones inteligentes, que suelen incrementar su valor con el paso del tiempo, por lo que adquirir una propiedad es una opción atractiva para los inversionistas. Sin embargo, no todos contamos con la solvencia para adquirir propiedades, ya sea para vivir o para rentar o para restaurar y rentar o re-vender.
Sin embargo, existen argumentos a favor para resolver las dudas que surgen al pensar en invertir, las más frecuentes son:
- Comprar una propiedad es muy caro y las mensualidades son altas y difíciles de pagar. Sin embargo, si pagamos renta, auto nuevo o tarjetas de crédito, podemos crear un plan de ahorro a cierto tiempo para pagar nuestro inmueble lo antes posible.
- ¿Qué pasa si compro una propiedad y después no puedo pagar la mensualidad? Dependiendo del modo de pago, podemos solicitar un plazo ya sea por desempleo, fallecimiento del titular u otro escenario que nos impida realizar el pago puntualmente.
- Hay que pagar impuestos sobre la propiedad. Es muy importante tomar en cuenta el pago de impuestos desde la planeación y cotización del inmueble, para incluir este monto en el plan de ahorro y pagos, de modo que tengamos contemplado el gasto.
- Los intereses de los préstamos son muy altos. Muchas personas se embarcan con créditos a muy largo plazo, que si bien les permite realizar pagos mensuales bajos, tienen tasas de interés muy altas, por lo que se recomienda buscar la opción financiera más amigable y de acuerdo a las posibilidades de pago de cada persona.
- Mi historial de crédito no me permite comprar inmuebles. Es importante buscar asesoría con un profesional que revise el historial crediticio, las posibilidades de pago y otros aspectos, para encontrar el modo más adecuado para adquirir un inmueble.
- El primer paso recomendable para comenzar a crear un patrimonio es consultar a un especialista para conocer las características y posibilidades de cada persona para comenzar a buscar la propiedad que se puede comprar y elegir el financiamiento para hacerlo. Estos profesionales también pueden ayudarnos a negociar el precio de venta, elegir el financiamiento adecuado y fijarnos en características importantes del inmueble a invertir, para realizar una compra segura.
Si encontramos el inmueble ideal y podemos pagarlo, no hay razón para no comprarlo e invertir hoy donde mañana nos gustaría tener nuestro patrimonio.
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