Lo primero que hay que determinar, es la cantidad de dinero destinada a dicho fin, comprar el bien raíz, no importa si tu inversión es una propiedad habitacional, comercial o industrial.
Debes considerar que invertir en bienes raíces implica una inversión a mediano plazo (alrededor de los 5 cinco años, dos arriba dos abajo), y no es una inversión líquida.
Es decir, no es una inversión de la que uno pueda salirse de un día a otro, ni es dinero en efectivo con disponibilidad a la vista o en ventanilla.
La inversión en Bienes Raíces debe reconocerse como un complemento de su inversión patrimonial. De ninguna manera se le sugiere 'meter todos los huevos en una canasta', es decir, recomendamos evite invertir el 100 % de su patrimonio en un solo inmueble. Considérelo como un complemento más a sus instrumentos de inversión; una acción hacia la diversificación de su cartera.
Es sumamente importante que antes de empezar a invertir en Bienes Raíces, acérquese a un profesional inmobiliario. El hecho de hacerlo por su propia cuenta, conlleva unas letras diminutas que dicen "BAJO SU PROPIO RIESGO".
El hacerlo sin un asesor inmobiliario puede significarle pérdida de tiempo, problemas legales, y pérdida de dinero. Hay que conocer con detalle los trámites y procedimientos notariales, legales, así como las mejores zonas para invertir, las tendencias económicas locales, así como las verdaderas ofertas sobre el valor de las propiedades. Lo más importante para usted es evitar poner en riesgo su patrimonio.
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